(Vespula germanica)
La avispa conocida vulgarmente como chaqueta amarilla (Vespula germanica) es una especie originaria de Europa pero actualmente se la encuentra en casi todo el mundo.
El éxito que tiene esta especie, quizás este determinado por su gran adaptación a distintas situaciones del medio ambiente y por no poseer enemigos naturales. Todo esto sumado a su voracidad hacen de esta avispa una especie problemática en algunas situaciones urbanas.
REPRODUCCIÓN
En primavera, una reina solitaria fecundada durante el otoño anterior inicia la construcción de un nuevo nido. La misma reina se encarga de alimentar a las larvas con una dieta proteica procedente de insectos adultos, orugas o incluso de la carne de heridas de vertebrados. Las larvas se convierten en avispas obreras, adultas y estériles, que se encargan de seguir con la construcción del nido y de alimentar las nuevas larvas.
La reina continúa poniendo huevos para producir más obreras que irán agrandando el nido, que llega a contener entre 8.000 y 12.000 celdas. El nido puede llegar a alcanzar cerca de un metro de diámetro y albergar entre 3.000 y 4.000 individuos, aunque la producción total de un nido puede llegar prácticamente a los 15.000 individuos. A finales de verano, de los huevos que pone la reina comienzan a nacer hembras fértiles, que serán las nuevas reinas, y machos que se encargarán de fecundarlas.
COMPORTAMIENTO
Estas avispas se encuentran habitualmente en zonas agrícolas y bosques, pero también es normal encontrarlas en zonas urbanas. Construyen sus nidos preferentemente en el suelo, aunque también pueden hacer nidos aéreos en las ramas de los árboles, techos, fachadas de edificios, etc.
En las zonas urbanas las posibilidades de construir su nido son muy amplias, pudiendo aprovechar cámara de aire de edificios, juntas de dilatación, etc.
ALIMENTACIÓN
La Vespula germanica posee una amplia dieta que varía de acuerdo a los requerimientos del nido. Durante la construcción del nido o frente a bajas temperaturas su dieta consiste principalmente en carbohidratos, donde el néctar de la flores, las frutas maduras y las secreciones azucaradas de los pulgones son sus fuentes de alimentación; mientras que el consumo de proteínas es mayor cuando las obreras deben alimentar a las larvas y crías, las que obtienen de artrópodos cazados. Puede tolerar bajas temperaturas, lo que le permite realizar la búsqueda de alimento en un amplio rango diario y estacional.